A lo largo de nuestra vida nos iremos encontrando con emociones y sentimientos que nos gustarán, nos resultarán agradables, querremos compartir, en cambio en otros momentos nos encontraremos con otro tipo de emociones y sentimientos que los clasificaremos como desagradables, incómodos, negativos, estos no nos gustarán y preferiremos no experimentarlas.
Todas las emociones y en consecuencia sentimientos, nos muestran algo. Si nosotros sabemos entender el mensaje de estas emociones, entonces las situaciones que vivamos, independientemente de como nos hagan sentir, bien, incómoda, estresada, frustrada, agradecida, serán positivas para mi.
¿Qué entendemos por positivas? Que me enseñan algo, que me hacen crecer y sobre todo que me acercan a un conocimiento interior que antes desconocía.
Con lo cual si reconozco la causa de mis emociones, entenderé el porqué la disfruto o la sufro, y a partir de allí será posible su manejo.
La gestión emocional es principalmente, entender la causa de mi emoción y observarla, averiguando que información me da para poder mejorar como persona, como profesional, como pareja, como amiga…
Lo que No es la gestión emocional es el control de mis emociones desde la contención y represión de las mismas.
Es fundamental que para manejar eficientemente mis emociones las exprese.