Cambio de hábitos

Cambiar un hábito no es tarea fácil, sobre todo cuando es algo que nos reporta un beneficio placentero a corto plazo, no obstante, sabemos que no es bueno para nosotros, no es bueno para nuestra salud, para nuestra autoestima, para nuestro éxito… Por ejemplo, fumar, relaciones tóxicas, diálogo interno negativo…

cambio

¡Qué difícil nos parece dejar de hacer algo que nos da ese placer momentáneo! ¡Qué difícil es dejar de hacer algo que nos va a hacer sufrir!

Pensamos: “prefiero seguir con esta relación tormentosa porque dejarlo me hará sufrir más”

Hoy en día nos da miedo sufrir, ¡no queremos sufrir!

No obstante, el sufrimiento es temporal, es un momento de duelo que hay que pasar. Son momentos que nos harán más fuertes, y curiosamente, son más breves de lo que nos imaginamos… De hecho, cuando estamos en el momento de dolor pensamos que nunca va a pasar y no vamos a superarlo.

Si quieres dejar de fumar, si quieres romper o poner límites a una relación tóxica, si quieres adquirir resistencia: ¡Toma decisiones!

Empieza tomando pequeñas decisiones, por ejemplo, si quieres dejar de fumar, ponte objetivos. Antes me fumaba al día 15 cigarrillos, ahora me fumaré 5.

Cada día que lo consigas date una recompensa por haber cumplido el objetivo, algo que consideres que es un premio J , la recompensa no puede ser fumarte un cigarrillo 😉

Una vez cumplido este objetivo, por un tiempo determinado, por ejemplo 1 semana, ponte un nuevo objetivo como fumarte 1 cigarrillo al día. Y así hasta que cumplas tu meta que es dejar de fumar.

Este ejercicio tiene su recompensa a corto, medio y sobre todo a largo plazo porque además va directamente relacionado con la autoestima y la actitud.

INICIO