Es el estilo de comunicación óptimo que podemos utilizar a la hora de relacionarnos con los demás.
¿Por qué? Porque el asertivo es el estilo donde predomina la seguridad en uno mismo, en lo que piensa y en como actúa, y al mismo tiempo ofrece su opinión y acepta las opiniones de los demás. Empatiza con su entorno y se sabe defender y poner límites.
En artículos pasados hablamos de los 3 estilos de comunicación y pudimos ver las diferencias.
En este artículo quería ofreceros herramientas que nos ayuden a ser asertivos.
En primer lugar, cuando tenemos buena autoestima, seguridad en nosotros es más fácil que podamos comunicarnos asertivamente.
En segundo lugar, es importante ser conscientes de que hay interlocutores que pueden pensar igual o diferente a nosotros y que es respetable que nos puedan decir que no, aunque nos estemos expresando de manera óptima y pensemos que tenemos razón.
En tercer lugar, la empatía juega un papel importante, pues ponernos en el lugar de la otra persona puede ayudarnos a entender y a comprender el porqué de su actitud y de sus necesidades.
Una vez tenemos estos 3 puntos claros para actuar con asertividad nos ayudarán 3 técnicas:
- Hablar en primera persona: “Me ha sentado mal como me has hablado” en lugar de “ me has hablado mal”.
- Expresar mis sentimientos y lo que pienso.
- Disco rayado: Aprender a decir que no utilizando la técnica del disco rayado. Es decir, repetir el NO tantas veces sean necesarias, como si fuésemos un disco rayado.